CUSTODIA PATERNA: Matrimonios en Chile que terminan en divorcio duran un promedio de 20 años

domingo, 18 de marzo de 2012

Matrimonios en Chile que terminan en divorcio duran un promedio de 20 años

Domingo, 18 de Marzo, 2012

Una cifra alta en comparación con otros países. Valorar y tratar de mantener la familia, pese al quiebre de la pareja, más el factor económico, retrasa muchas veces la decisión.
Ximena Bremer (49) se casó en 1988. Tenía 24 años. Era su segundo matrimonio. Una segunda oportunidad, cuenta, que terminó a los 20 años en divorcio. Eso sí, reconoce, los problemas partieron una década antes. Pero mantenían el matrimonio. No tenía trabajo. Y quería esperar a que la menor de sus tres hijas cumpliera 15 años.
Pero al llegar a su aniversario número 18, se decidió. Una mañana, su ex esposo le comentó que en la puerta de la casa había un camión. "Es para mí, me voy", le respondió. A los dos años estaba divorciada.
Xiemena no lo sabía, pero su matrimonio duró el promedio de años que alcanzan a estar casados los chilenos que se han divorciado. Así lo indican las cifras de divorcios del Registro Civil: si en 2009 el promedio fue 21,77 años a la hora de divorciarse, al año siguiente pasó a 22,07 y en 2011, 22,32 años.
Un período largo si se toman en cuenta los promedios internacionales (ver recuadro), y que no da cuenta de la disolución de la unión civil por muerte de uno de los cónyuges. Datos de la Family Database de la Ocde señalan, además, que la tasa media de duración del primer matrimonio en el mundo es de 13,6 años, indica Juan Carlos Oyanedel, sociólogo del Departamento de Matemática de la U. Andrés Bello.
Valoración de la familia y enfrentar aspectos patrimoniales, son parte de las razones para que una pareja mantenga la relación.
Así, si se considera que la edad media al contraer matrimonio hace 20 años, según cifras del Instituto Nacional de Estadísticas, era 27 años para los hombres y 24 años para las mujeres, esas parejas que se divorcian con dos décadas de convivencia lo hacen un poco antes de su cumpleaños número 50.
Veronica Gubbins, coordinadora del Servicio de Mediación Familiar, de la Facultad de Psicología de la U. Alberto Hurtado, sostiene que muchas veces el extender el matrimonio aunque ya no sean pareja, se explica por la relevancia de mantener la estabilidad familiar. Valoran la familia. "Son de una generación para la cual las separaciones no eran muy bien vistas y la idea del matrimonio indisoluble no era sólo un discurso religioso. En ese escenario, no se trata de una decisión fácil", dice.
Se debe considerar, además, agrega la sicóloga, otro factor importante: los hijos están en primer lugar. Hay una creencia arraigada, sostiene, que la separación puede generar un trauma en los niños y todo padre evita que sus hijos sufran. Es así como el matrimonio, pese a no ser pareja, trata de mantener la estabilidad en la relacion padre y madre, especialmente a lo largo de la infancia de sus hijos. A su vez, asumir hoy la crianza conlleva muchas exigencias, y ellos tratan de acompañarse en esa tarea.
Sin embargo, dice la sicóloga, si la pareja no tiene una buena convivencia, para los hijos no es algo indiferente: "Los niños son particularmente sensibles a las miradas o gestos que hacen evidente que hay tensión y distancia entre ellos".
Esos motivos prolongan la decisión de divorcio, incluso cuando la separación dentro del hogar ya está hecha de facto. Gubbins ha trabajado con matrimonios que están en proceso de divorcio, y por lo que ha visto en la práctica, tomar la decisión de separarse es un proceso suele llevar entre tres a cinco años.
Otro aspecto, como describe Eugenia Kemm, coordinadora técnica de Familia de la Corporación de Asistencia Judicial R.M., tiene que ver con las dificultades que se plantean al terminar el matrimonio, especialmente por el tema patrimonial. La mayoría al casarse en Chile opta por el sistema patrimonial de sociedad conyugal (en 2011 fueron el 54,17% del total de matrimonios). Tener bienes en común durante el transcurso del matrimonio no es problema, dice Kemm, pero al finalizar vienen los conflictos: "Hay que liquidar y dividir los bienes y se produce aprensión por parte de los cónyuges".
Pau Miret Gamundi, investigador del Centro de Estudios Demográficos de la Universidad Autónoma de Barcelona, comenta a La Tercera, que en España se vive una situación similar a la chilena. La duración media de los matrimonios que finalizaron en divorcio en el año 2010, fue de 15,18 años. Cifra que a escala europea, explica, es tardía. El especialista español agrega que el divorcio, además, es muy costoso, tanto para el hombre como para la mujer. Implica deshacer un hogar y construir otros dos, muchas veces desde el principio.
¿Hay también una mayor valoración del matrimonio? Pau Miret Gamundi señala que en el caso de España, no se debe a que se valore más. Eso supondría el que la gente se case más en España que en otros países europeos. Y no es el caso. Más bien, afirma: "Parece que la gente vive más tiempo en matrimonio porque las mujeres están dispuestas a aguantar más (discriminación o papeles de género contrastados) que en otros puntos de Europa".
A todo lo anterior, además, se agrega un tercer factor que retrasaría la decisión: la participación femenina en el mercado laboral en los 80, cuando gran parte de esas parejas se casaron, era de 23% (hoy es de 49%), un porcentaje bajo. Por ende, la proporción de dueñas de casa era alta. Para ellas, dice Gubbins, separarse significaba empobrecimiento y un gran miedo de plantearse en la segunda mitad de la vida un gran desafío: trabajar.
También los hombres se plantean temores al finalizar el matrimonio. En su experiencia con parejas que se divorcian, Gubbins, ha escuchado de muchos que les resulta cómodo tener un hogar organizado para desempeñarse de manera activa en el trabajo. Pero además, agrega, sicológicamente, es más cómodo mantener un estado conocido, que pensar en los cambios de dejar de compartir el hogar con otro.

Las cifras de otros países
1 En Inglaterra, según la Oficina Nacional de Estadísticas, el promedio es de 11 años juntos antes del divorcio.
2 En EE.UU, según datos del Censo de 2004, la duración media es de ocho años.
3 En Australia, según la Oficina Australiana de Estadísticas, la duración promedio es de 14 años.
4 En Argentina, según cifras de los juzgados civiles, es de 10 años.